Leamos donde Sea es un refugio de letras donde puedes encontrar ideas, experiencias y frases de mis lecturas favoritas para seguir descubriendo y compartiendo la magia que hay en los libros.
Tengo la teoría de que existen libros que eligen a sus lectores para brindarles la compañía, refugio y sabiduría en el momento preciso que estos lo necesitan. Y justo esta creencia ha venido a reforzarse con Anhelo de raíces de May Sarton que, en medio de un proceso donde me encuentro reubicando mi lugar en el mundo, me ha traído valiosas enseñanzas sobre el poder de la confianza, creatividad y presencia para construir y habitar ese espacio, tanto físico como en mi interior, al que pueda llamar hogar.
He traído todo lo que soy… Una combinación extraña, que no existe en ningún otro lugar de la tierra… y esa ha sido precisamente la aventura.
~ May Sarton.
En este libro la autora comparte sus memorias sobre el proceso tanto intenso como personal que atraviesa cuando, después de la muerte de sus padres, decide comprar su primera casa y transformarla en el hogar donde le es posible cultivar la belleza, la libertad y la escritura. Así, nos regala pasajes y reflexiones valiosas que hoy te quiero compartir.
Sobre mudarse
Yo también he conocido el desasosiego interior del exilio,
la peligrosa sensación de no estar en casa en ninguna
parte,
el centro disperso, el amor dividido;
ni aquí, ni allí, el salto a través del océano,
el vaivén entre dos firmes lealtades…
¿Podría ser feliz en aquella casa? ¿Acudiría la poesía?… Todo allí había sido cuestión de creer en intangibles, de estar atenta a las señales.
Por más ajeno que algunos de nosotros podamos considerar a un forastero, en realidad somos parte de una red invisible y nos apoyamos en su existencia.
Sobre construir el nido
Quería aire, luz y espacio… Vi la casa como mi propia creación.
Elegir, definir, crear armonía, aportando esa claridad y estructura que dan el reposo y la luz al desorden y la confusión.
Un lugar como este hay que modelarlo y remodelarlo palmo a palmo. Hay que esperar y ver. Hay que esperar y confiar. Hay que esperar y trabajar.
Sobre rituales
La rutina no es una prisión, sino el camino hacia la libertad del tiempo.
En aquel primer fin de semana establecí el rito de la cena. Cuando me sentara a la mesa, tenía que haber flores; debía haber una botella de vino y que la mesa estuviera puesta con esmero, como por el mejor sirviente. Un libro abierto para poder leer, el equivalente a la conversación civilizada para un solitario. Todo estaba preparado como para recibir a un invitado y el invitado de la casa iba a ser yo.
Sobre escritura y poesía
El escritor, solo en su mesa de trabajo, tiene que crear su propio impulso, extraer entusiasmo de su propia esencia, y no solo cuando se siente inspirado, sino día tras día, aunque la inspiración no acuda.
Los problemas o suplicios derivados de mi vida en aquel lugar de algún modo me enriquecían, aunque pareciera que cuando llegaban no traían consigo más que interrupciones y frustración. Problemas ocasionados por el clima, nevadas, sequías, temporales, que te afectan hasta la médula. Enseguida se convierten en metáforas en tu mente; son materia poética.
El mundo interior, el mundo de la poesía, se nutre tanto de malos tiempos como de cualquier otra cosa.
Arreglar flores es como escribir en cuanto es el arte de elegir. Entre el rico material que requieren los enunciados no todo se puede utilizar. Así como uno intenta una palabra y luego otra, junta una frase para luego separarla, del mismo modo uno arregla las flores. Es un trabajo que requiere de una vista descansada y una mano firme.
Sobre cambios y ciclos
Uno de los goces de un jardín es que siempre le está sucediendo algo; no es estático, nunca un día entero.
¡Cuánta esperanza, expectación y trabajo duro se pone en lograr un mínimo éxito! No hay certeza de nada, excepto de que lo creado con el tiempo va a cambiar.
Nosotras envejecemos cada año, pero no el jardín; él cada primavera renace.
Envejecer. ¿Por qué en nuestra civilización lo consideramos un desastre y solo valoramos a la mujer «que se mantiene joven»? ¿Por qué «mantenerse joven» cuando la aventura radica en el cambio y el crecimiento?
¡Que belleza! Me ha encantado todas las citas que has incluido. Aunque ya leí el libro, ha sido un lindo recordatorio de los aprendizajes de May Sarton. Gracias
Qué hermoso Gaby! Lo buscaré para leer 💖 Amé la parte de los rituales y resueno mucho con hacerlo en esos pequeños- grandes momentos de nuestra vida, como sentarnos a una mesa a comer o, leer/ escribir en nuestros rinconcitos sagrados. Incluso logré imaginarme con las flores, el vino y un buen libro 😅🍷💐