Durante una etapa de mi vida donde la ansiedad se hizo muy presente y el miedo a lo desconocido me paralizaba, un día decidí armarme de valor para mirar a la incertidumbre de frente y dejar de correr de las emociones incómodas que se me despertaban.
De esta manera pude reconocer que había llegado la hora de transformar esa identidad por la que tanto apego sentía y abrirle paso a una nueva versión de mi que hasta ese momento no conocía.
Así, siguiendo mi intuición, decidí empezar por cortarme el cabello para despedirme del pasado y darle la bienvenida a una nueva posibilidad. Esa que aunque no dimensionaba todavía, estaba dispuesta a descubrir y habitar.
A partir de ese momento, cambios y oportunidades que ni en sueños hubiera podido predecir, comenzaron a suceder. Cambié de casa, de carrera, de amores, proyectos, metas y sueños. Cambié de piel.
Hoy, ocho años después de esa decisión acompañada de trabajo interno que marcó el inicio de una nueva realidad, escribo estas letras con el mismo corte de cabello sabiendo que siempre puedo volverme a transformar.
Con amor,
Gabriela.
Ahora que nos encontramos en la temporada de otoño 🍂 en el hemisferio norte donde la naturaleza nos enseña sobre el proceso de soltar y transformar, ¿Qué sientes que es momento de dejar ir en tu vida para abrirle espacio a una nueva posibilidad?
Qué lindo cuando tomamos una decisión y la vida nos responde con sincronías como la que te pasó con Frida 🥹 siento que cuando pasa, nos quiere decir: “vas por buen camino”! 🩷